La necesidad de un director independiente en el consejo de administración de una empresa surge de la necesidad de un director que pueda tomar decisiones imparciales en beneficio exclusivo de la empresa.
Además, en Europa, por ejemplo, la “Directiva contra la evasión fiscal III” o “ATAD III” recomienda a las empresas que demuestren que sus compañías no son entidades ficticias con falsos directores. Las autoridades luxemburguesas ya insisten en esta necesidad de contar con verdaderos consejeros independientes en los consejos de administración de las empresas.
La elección de un director independiente con experiencia empresarial le ayudará sin duda a mantener la estabilidad para alcanzar sus objetivos empresariales.
El director independiente debe defender los intereses de los accionistas, de los empleados y de toda la empresa.
¿Quién es un director independiente?
Un director independiente no es su abogado ni el contable que gestiona su contabilidad.
Un director independiente es un miembro del consejo de administración de una empresa que no tiene una relación material o pecuniaria con la empresa, sino que es nombrado para aportar opiniones profesionales e independientes únicamente en interés de la empresa.
Nombrar a un director independiente como parte del consejo de administración significa que hay alguien en el consejo de administración que no es parcial y puede actuar totalmente en el mejor interés de la empresa.
A continuación se exponen las principales razones por las que todo consejo de administración necesita un consejero independiente.
Imparcialidad y experiencia
Dado que el consejero independiente no tiene una relación material con la empresa, no está sujeto a influencias innecesarias del equipo directivo, lo que puede permitirle ser más imparcial y objetivo.
Además, el nombramiento de un consejero independiente suele dar lugar a un mayor asesoramiento y experiencia de terceros, dadas sus habilidades y conocimientos en áreas fundamentales.
Los directores independientes pueden ofrecer un enfoque
En las empresas de nueva creación, es habitual que los miembros del consejo de administración dividan su atención entre varias empresas en las que tienen intereses. Es posible que estos miembros estén sometidos a diversas variables que pueden afectar a su nivel de compromiso o implicación. En estos casos, un director independiente puede ofrecer un enfoque y una perspectiva profunda a la empresa.
Habilidades y experiencia necesarias
Con muchos directores independientes con diferentes habilidades disponibles, la empresa tiene varias opciones para elegir. La empresa puede contratar a personas con experiencia en un área concreta en la que la empresa quiera centrarse.
Al incorporar a un director independiente con conocimientos específicos, la empresa puede aprovechar las oportunidades de crecimiento y evitar potencialmente costosos errores.
Los directores independientes son la clave para la resolución de conflictos
En todos los consejos de administración, es prácticamente una garantía de que habrá conflictos de intereses. Y en la mayoría de los casos, cuando se producen estas situaciones, los directores independientes pueden ayudar a resolver el problema. Evitan que los miembros del consejo tomen decisiones en interés propio y garantizan que todos los movimientos y transacciones se realicen pensando en la empresa.
Aunque el director externo apoye firmemente una de las creencias, al estar cerca de ambas partes, se encuentra en una posición especial para llegar a las cuestiones principales y encontrar un acuerdo mucho más rápido.
Los directores independientes aportan una perspectiva única
Un director independiente no está vinculado a las tradiciones empresariales y es libre de examinar la empresa con transparencia y objetividad, aun a riesgo de desafiar las suposiciones sobre lo que es bueno para la empresa. La mayoría de las veces, la experiencia y los contactos que un consejero independiente aporta a una empresa son un recurso de valor añadido.
Además, los consejeros independientes pueden ser necesarios para ayudar al consejo en la contratación de nuevos empleados ejecutivos.
La introducción de un director independiente en el consejo de administración es una de las mejores estrategias de gestión disponibles en la actualidad. De este modo, el órgano de gobierno tendrá siempre una nueva perspectiva externa y tendrá en cuenta la opinión de terceros a la hora de tomar decisiones cruciales.
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